Es un aliado fantástico para que tu mascota reciba una ayuda a la hora de regular su temperatura corporal evitando golpes de calor. Su funcionamiento es sencillísimo solo hay que ponerlo en suelo y listo, no tiene enchufes y no hay necesidad de enfriarlo. El líquido interior empezará a trabajar con el contacto del cuerpo, por el propio peso del animal. Su interior no es tóxico y su exterior es de un material cómodo y muy confortable